John Hancock (Will Smith) es un superheroe bastante apático con un problema serio de alcohol; aunque de pronto muestra interés por realizar sus clásicas labores de héroe, tiene un grave problema de actitud (y de relaciones públicas).
Un buen día tiene a bien rescatar a Ray (Jason Batheman), un publirelacionista que trata de poner su "granito de arena" para cambiar al mundo (sin mucho éxito), por lo que en gratitud le ofrece a Hancock encontrar la manera de que la gente lo ame, en lugar de odiarlo.
Por desgracia, lo único bueno de esta película es lo que se aprecia en el trailer, que básicamente abarca la primer mitad del filme; la segunda mitad desafortunadamente se torna aburrida y tediosa, con una sub-historia poco interesante y desangelada (eso sí, con montones de efectos especiales); simplemente se cae por completo el ritmo y el atractivo de Hancock en la segunda mitad.
No diría que no la recomiendo, pero sin duda pudo estar mucho, pero mucho mejor.
0 comentarios:
Publicar un comentario